Desde que publicó su primera novela en 1964, Joyce Carol Oates ha publicado más de cuarenta novelas. La última es Carthage de la editorial Fourth Estate.

La novela trata sobre la desaparición de Cressida, una joven residente en la ciudad de Carthage de New York, que se relaciona con el sospechoso Brett Kincaid, un veterano de la guerra de Afganistán. La novela poco a poco se transforma en una exploración sobre la violencia en un sentido mucho más amplio, sicológico y emocional. Como muchos de sus libros, Carthage se zambulle directamente en los rincones más oscuros y terroríficos de nuestra psyquis individual y cultural.

 

Joyce Carol Oates se ha convertido en la sicoanalista literaria de Norteamérica: "Creo que para sentarse a la mesa y escribir no se necesita un estado particular. La escritura es una experiencia trascendental , que es ir más allá de lo que estorba a la mente. Así que sea cual sea el estado de ánimo que uno tenga, se tiene que superar de todos modos. Me he dado cuenta de que cuanto menos ganas de ponerme en situación, más productiva soy. Es una disciplina, un alto desafío, un deporte de alto nivel".

"Lo importante es hacer que el lector esté más vivo . El placer que el escritor ha obtenido al crear su obra no es suficiente. Tome como ejemplo Mein Kampf . Su autor pudo divertirse escribiéndolo, pero el libro no es un placer para los demás. Mi propia experiencia de la escritura pasa a través de la resolución de problemas . El cerebro humano está hecho para esto. Se divierte resolviendo rompecabezas, enigmas . Este es un
desafío neurológico muy emocionante . Cuando uno escribe, se dedica a resolver problemas en cada párrafo, en cada frase;, el libro es un juego de construcción que uno está tratando de organizar. Y el lector juega enseguida contigo, entrando en tu mecanismo".