Entre la pachamama y la hipótesis Gaia
Autor: Mariano Rivera Cross
Extracto de la presentación en el Ateneo Escurialense de San Lorenzo del Escorial, 13 de marzo de 2017
En un momento histórico, tal nuestro período de los primeros compases del siglo XXI, donde lo relativo a fundamentos, teorías, e incluso leyes políticas ecológicas se imponen en la conciencia y forma de vivir ética del hombre postcontemporáneo, como una necesidad por supervivir y al mismo tiempo como una necesidad por encontrar las esencias de los orígenes de la vida en nuestro planeta, con el fin de comprenderla y amarla, se hace necesario e imperativo la aparición de un poemario donde se nos ofrezca la comunión de la Tierra con el Hombre, desde una doble perspectiva: a) la telúrica y mítica, heredada de los antepasados indígenas andinos, tan adscrita a nuestra historia del descubrimiento, colonización y civilización de las Américas, la que podíamos llamar la Pachamama protectora, y b) la científica y actual hipótesis Gaia, emitida por el científico inglés Lovelok en 1969.
Y, precisamente, “Terra Sum” del poeta Manuel Saborido, es el libro de poesía que nos calma la ansiedad de sabernos inmerso en el profundo y bello misterio de la vida en la Tierra.
Ante una estructura, magníficamente orquestada, semejante a las múltiples y diversas partes vibrantes de la Sinfonía Nº 9, en Mi menor Op.95 “Del Nuevo Mundo” de Antoni Dvoràck, el lector va a tener la posibilidad de escuchar los consejos de su madre Tierra, de pedirle protección en el silencio y en la oscuridad del vacío escéptico de la nada, y, al mismo tiempo, unirse a la voz de la denuncia, de la crítica ecológica por mantener y resucitar la semblanza, la caricia, el color y el calor de las manos telúricas y maternas de la tierra, como y madre y diosa.
Poemario escrito con versos blancos, alejandrinos y endecasílabos. Confiriendo esta variedad de versos al libro un ritmo a un tiempo melodioso y sentencioso. Ajustado a ese doble sentido significativo, por una parte, de ternura, amor y protección, y de otra, denuncia ante el alejamiento del ser humano del origen telúrico de, su existencia, acarreándole tantas injusticias, angustias, soledades y horizontes futuros nada halagüeños.
De la poesía de la experiencia a la de los Novísimos, Manuel Saborido sobresale en el panorama de la poesía actual en lengua española por su vitalismo personal, por no pertenecer de manera fidedigna a ninguna corriente establecida. A Manuel Saborido le identifico en el panorama poético de principios de nuestro siglo, como islote del archipiélago llamado POESÍA (revista Ínsula nº: 124. Amparo Amorós), al que ha llegado en su afán de libertad, de no estar atado a corrientes poéticas.